La primera regla de un romance de oficina es no tenerlo... especialmente si tu sueño es mantener tu puesto en las noticias de la noche y tu jefe está intentando despedirte. Pero una mirada a Cade Hill, el nuevo sexy director de deportes, y la remilgada reportera Rebecca Fielstone empieza a soñar despierta con otras cosas. Sexo en su oficina... Sexo en la cocina del set... Sexo en el armario de suministros... No puede dejar de pensar en el antiguo querterback de campo de la NFL y lo perfecto que se vería entre sus sábanas, pero es un arrogante idiota con un enorme... ego. Él es el último chico con el que alguna vez tendría una aventura.
Cade Hill ha marcado una gruesa línea profesional en lo referido a romances de oficina, hasta la súper concentrada Rebecca. Él la quiere, y lo consigue cuando un encuentro casual les hace tener el sexo más ardiente de sus vidas. Es solo un rollo, dice ella. ¿Cuándo podemos hacerlo de nuevo?, dice él.
Con Rebecca decidida a mantener a Cade en la zona de amigos, va a ser una ardua batalla para que Cade la convenza de que él es el último chico que ella querrá alguna vez.
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