Los Dioses les sonreían a sus descendientes desde los cielos, amorosos, generosos. Pero eso era antes. Ahora el cielo está contaminado, y el pueblo que fue privado de sus creadores de la noche a la mañana ha quedado huérfano durante casi dos siglos.
Desde aquel fatídico día, La Corrupción ha reinado sobre el mundo. Profanó las nubes y cubrió las tierras con un velo de oscuridad. Los primeros conflictos surgieron en el Este del continente Coroman, algunos bajo el impulso de creencias que pedían sangre y llamas. Mientras el odio sigue extendiéndose, los Dioses desaparecidos ya no responden a ninguna plegaria, algunos luchan por una vida pacífica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.