Rigel el Cazador ha orado para que termine la maldición de su gente. La inmortalidad ha llegado con un alto precio: la soledad. Cuando una bella mujer humana, Lyra Harne, es lanzada al océano su destino está en sus manos. Incapaz de negarse la salva, pero ¿A qué costo? Viviendo en la ciudad perdida, Atlántida, las mujeres son raras y esta sexy mortal es más de lo que este guerrero tan duro puede resistir.
¿Es la belleza que Rigel salvó un regalo de los dioses? ¿O simplemente otra parte de su maldición? La tentación y el deseo no son rival para el destino y la verdad del naufragio de Lyra podría ser demasiado para este asunto submarino.
Atlantis, una ciudad perdida de intriga para la mayoría, es el hogar de Brutus, su maldición, su prisión. Condenados a una vida inmortal en las profundidades del océano, su única posibilidad de salvación es rescatar a las damas en apuros del mundo superficial y llevarlas al abismo.
Mientras que la mitología puede etiquetarlos a él y a su especie como monstruos, este guerrero es simplemente un hombre con necesidades. Y ha encontrado a la mujer perfecta para ocuparse de ellas.
Cuando Demon, un tritón encargado de patrullar el océano en busca de humanos en peligro, se encuentra con una mujer anclada en el fondo del mar, está seguro de que sus sueños se han hecho realidad. Después de todo, ella es impresionante, soltera, y hace que su cuerpo arda de necesidad. También es impetuosa, es perseguida por sus enemigos y tiene serios conflictos sobre si es o no un buen tipo. Es su deber no solo protegerla, sino ganarse su corazón, porque este tritón solitario está seguro de que ella es la adecuada para él. Ahora solo tiene que convencerla de eso.
Lucius, Rey de los Merr, y gobernante de la ciudad de Atlantis, carga con la culpa de la maldición de su pueblo. Después de estar atrapado bajo el mar durante dos milenios, ha llegado el momento de que su gente salga a la superficie y respire aire. Está listo para ser el primero en probar la teoría, pero las cosas no salen como se esperaba cuando una belleza cautivadora aparentemente cae en su regazo y en su océano.
¿Olivette es un regalo de los Dioses, o una advertencia para permanecer castigados bajo las olas a las que pertenece su pueblo?
¿Olivette es un regalo de los Dioses, o una advertencia para permanecer castigados bajo las olas a las que pertenece su pueblo?
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.