EROTISMO

EL CLUB (DEL SEXO)

La primera regla del Club es: No hay cabida para el amor.

El Maestro pone reglas simples y claras, si las fallas, te vas.

No hay piedad.

Ni segundas oportunidades.

Para ser miembro del Club debes pasar rigurosas pruebas, firmar documentos de confidencialidad y ceñirte a las estrictas normas que lo rigen, si estás dispuesto, solo te queda dar el paso y disfrutar de todo lo que hayas podido imaginar.

Úrsula Jones es conocida en el Club como Lady Kitten, una fogosa joven que quiere experimentar plenamente y se presta para nuevas experiencias. Se une a la comunidad porque los chicos de su edad son inexpertos, asustadizos y deforman la realidad de las cosas, el sexo no es como en el porno, ella lo sabe, por eso no anda con niños para cuestiones de placer. El Club le da un espacio seguro para probar y autodescubrirse, ¿es sumisa? ¿es dominante? ¿es una exhibicionista? ¿una loli? Aún no lo sabe, pero está dispuesta a descubrirlo.

Sydonai es conocido entre las miembros como el demonio del sexo, es exigente, arrebatador, pero recompensa bien a sus amantes. Él seduce, domina y somete. Su personalidad controladora es el reflejo de cómo es en su vida real, Ryan Milton no tiene tiempo para cazar mujeres en bares ni para andar conquistando señoritas, su vida es el trabajo, el dinero y la única relajación es el Club.

Ella quiere probar, es puro fuego a punto de descontrolarse; él cree que puede someterla, porque los demonios viven en el infierno; pero en ese juego, ninguno de los dos, gana. Lo saben, y no quieren admitirlo.

Solo que, cuando esos dos se tocan… es como juntar el hambre, con las ganas de comer.